Mi experiencia

Skoon es un proyecto robótico y medioambiental que consiste en un robot autónomo que limpia la basura de las playas antes de que llegue al mar.

Cada año ingresa al mar una gran cantidad de basura generada por el ser humano, en su mayoría plásticos que tardan cientos de años en degradarse, y una vez estando en el agua, son mucho más difíciles de extraer, conviertiéndose en un gran peligro para todo el ecosistema marino.

Buscamos información acerca de la basura en el océano y encontramos que gran parte del plástico que llega a los mares proviene de las playas: botellas, envases de galletas, papas fritas, cigarrillos… muchos cigarrillos. ¿Y qué pasa?, cuando el mar sube se lo lleva todo y los desechos terminan en enormes islas de basura.  

Lo que pensamos es que, en vez de sacar la basura del agua, que es más complejo, mejor evitemos que llegue ahí, nunca debió haber llegado ahí de hecho, así que fuimos un paso más atrás en la cadena y nos dispusimos a buscar una manera de limpiar las playas de forma más regular y eficiente.

Nuestra solución consiste en un robot eléctrico, que usa energía limpia, autónomo, es decir que no requiere de un conductor ni supervisión directa, que limpia la basura de las playas antes de que llegue al mar.

El robot, con sensores y GPS, se conduce solo a lo largo de la playa, haciendo un recorrido donde recoge la basura que hay tirada y un poco enterrada en la arena y la va guardando en un contenedor que tiene detrás. Cuando sensa que está lleno, se dirige hacia basureros predispuestos en la playa y sigue su camino. La idea es, en un futuro, conectar estos basureros con empresas de reciclaje.

El robot se diferencia del mercado existente por su uso de fuentes renovables de energía y autonomía de operación.